La primavera o el otoño son mejores estaciones para recuperar un olivar que el verano, pero, si ya estamos en verano y nos encontramos ante un olivar con una clara defoliación ¿merece la pena esperar al otoño para ponernos manos a la obra?
Todo depende del estado hídrico del olivar y de si contamos con riego o no. Porque, obviamente, en condiciones de estrés hídrico no es para nada recomendable realizar un tratamiento, a pesar de ser necesario.
Sin embargo, si contamos con riego o un estado hídrico favorable, mi opinión es que todo lo que puedas adelantar el tratamiento estarás adelantando para la recuperación de la finca y garantizando el tallo para la cosecha del año siguiente. A mí se me ha dado el caso y no he esperado a otoño, hemos tratado en verano (porque las condiciones lo permitían).
Te explico todo esto en este vídeo!